Posteriormente cuando la mujer decida que ha llegado su momento de ser madre, puede descongelarlos y exponerlos a la fecundación con el semen de su pareja o de la persona escogida para tener el bebé. La fecundación puede realizarse mediante diversas técnicas, pero la mayor eficiencia se consigue en la fecundación in vitro.
Ventajas de congelar tus óvulos:
- La maternidad no será un obstáculo para tu vida personal o profesional
Muchas mujeres se plantean hoy en día el dilema entre escoger una carrera profesional o desarrollar la función de ser madres en toda su plenitud, y deciden que una cosa no tiene por qué ser un obstáculo a la otra. Al menos, no están de acuerdo en que lo sea; no están dispuestas a quedarse aparte de la sociedad, ya que consideran que tienen tanta valía como los hombres. También hay empresas en todo el mundo que lo ven del mismo modo.
¿Por qué una profesional con potencial y talento debería retirarse a ser madre por el simple hecho de que a los 40 su fertilidad ha descendido vertiginosamente? Hoy la ciencia puede solventar estos inconvenientes con la congelación de óvulos y empresas de Silicon Valley como Facebook y Apple ofrecen a sus ejecutivas este tratamiento como un aliciente a la hora de contratarlas. Si congelas tus óvulos, tu decides cuándo, cómo y con quién serás madre.
- La congelación de óvulos te permitirá usar los óvulos de mejor calidad
El porcentaje de fecundación de un óvulo congelado varía en función de muchas circunstancias, entre el 40 y 70% de eficacia. Una de estos condicionantes es la edad a la que congelamos nuestros óvulos. La mejor edad empieza a los 20 años y después desciende progresivamente hasta los 35 años. Cuanto más joven congeles tus óvulos, mayor será la eficacia de un posterior tratamiento de fecundación.
Además, de este modo podrás asegurar la salud del niño mucho mejor. La fertilidad de la mujer se reduce al pasar los años, esto hace que las posibilidades de quedarse embarazada también disminuyan debido al envejecimiento de los ovarios, también hay que tener en cuenta el riesgo de posibles anomalías cromosómicas en el futuro bebé. Tus óvulos cuando eres joven gozan de una calidad mucho mayor que los que produces con treinta y tantos.
- No tienes que estresarte por que se te acaba el tiempo para ser madre
La dotación de ovocitos con la que nace una mujer se va perdiendo progresivamente. En cada período menstrual se pierden unos 1.000 ovocitos, por lo que a la edad de 35 años tan sólo quedan un 10%. Las mujeres nacen con un promedio de un millón de óvulos, llegan a la pubertad con 400.000 y, a partir de ahí, se van perdiendo en cada regla, ya que de los potenciales óvulos de cada periodo solo uno sale adelante.
La congelación de óvulos supone estimular a los ovarios para que produzcan todos aquellos óvulos que iba a desechar para aprovecharlos. Quedarán congelados para que cuando decidas ser madre, estarán a tu disposición aunque estés entrando en la cuarentena y tu fertilidad ya no estará totalmente condicionada por la edad que tengas.
- Tus óvulos evitarán tratamientos de salud agresivos
Si congelas tus óvulos te previenes contra problemas cuyo tratamiento podría dejarte estéril. Por ejemplo un cáncer. Tratamientos como la quimioterapia y la radioterapia dañan seriamente los óvulos, por eso la congelación de óvulos permite ser madre una vez superada la enfermedad.
- Si en un futuro tuvieran que extirparte los ovarios, no se truncaría tu sueño de ser mamá
Si el cáncer, o cualquier otro problema, exige que te tengan que extirpar los ovarios, la congelación de los óvulos permite sortear la infertilidad inherente a estas soluciones. No tendrás qué sentir que te han quitado la capacidad de crear vida porque de hecho siempre podrás recurrir a descongelar tus óvulos si quieres ser madre.
Si te estás planteando congelar tus óvulos para ser mamá en un futuro, en Clinicpoint tienes una selección de centros de referencia con los que trabajamos la congelación de óvulos a precio preferente.